Cultivar lechuga en macetas ¿es posible?

Cultivar lechuga es una de esas cosas que deberías de hacer si estás comenzando tu aventura con la jardinería y no quieres desanimarte con esta actividad. Y es que la lechuga es uno de esos cultivos que siempre funcionará por muy novato que seas y por muy mal que lo hagas. No importa dónde la plantes, cómo lo hagas y no importa qué tipo lechuga quieras cultivar. Sin duda, se trata de una planta muy fácil de germinar y cuidar.

¿Qué es la lechuga?

La lechuga (Lactuca) es una verdura de hoja que pertenece a la familia Asteraceae y que es anual. La especie típica y más conocida es la Lactuca sativa, pero también se conocen alrededor de otros 100 tipos de lechuga diferentes. Tienen diferentes formas de hojas, colores y sabores, así que dependiendo del tipo de lechuga que nos guste o que queramos producir deberemos comprar unas u otras semillas para después plantarlas.

Cómo cultivar lechuga

Cultivar lechuga es algo realmente sencillo y para lo que no necesitarás tener ninguna experiencia y tan solo seguir unas pequeñas instrucciones. Una vez hayas comprado las semillas de lechuga que quieras cultivar, plántalas en primavera, cuando el suelo se está descongelando (cosecha inicial) o al final del verano (cosecha posterior).

Las semillas de lechuga se deben sembrar en marzo o abril, ya sea en maceta o directamente en el suelo. De esta forma estarán listas para la cosecha de otoño, e incluso después de mediados de julio.

La lechuga sabrá muy bien en primavera y otoño, cuando los días son frescos y el día es más corto. En verano, la lechuga puede presentar inflorescencias y su sabor se torna algo amargo. Por lo tanto, funciona mejor como cultivo coordinado, junto con otras verduras que se cosechan en el verano. Una buena compañía para la lechuga son: guisantes, pepinos, repollo, hinojo, zanahorias, rábanos, tomates, cebollas y eneldo, entre otras plantas. De las hierbas aromatizantes podemos sugerirte menta, cilantro o perejil.

Si no quieres plantar semillas, porque por ejemplo no puedes esperar, puedes adquirir plántulas de lechuga, que puedes comprar en una buena tienda de jardinería.

Cómo cuidar la lechuga

La lechuga de la que vamos a cortar hojas de forma frecuente, en realidad, no necesita cuidados especiales. Simplemente debemos de tener en cuenta sus cuidados básicos, con lo que evitaremos que se pudra o adquiera alguna plaga o enfermedad. Recuerda, al consumir, únicamente cortar algunas hojas de la parte exterior y nunca arrancarla por completo, ya que de lo contrario la planta morirá.

No debemos de pasar por alto que la lechuga tiene una temporada de crecimiento corta, la cosecha se realiza en un periodo aproximado de 4 semanas después de la siembra. Cuando te des cuenta de que la planta se ve cada vez peor y su sabor ya no es bueno, se retira y comenzamos a cultivar de nuevo.

De las otras verduras de hoja que se cultivan de forma regular, podemos cambiar entonces por col china, rúcula, remolacha y espinacas.

¿Cuáles son las principales enfermedades de la lechuga?

Las enfermedades peligrosas de la lechuga en cultivos bajo cubierta son, entre otras: mildiú, moho gris y pudrición por hongos. Existen pocos preparados registrados para la protección de lechugas bajo cubierta, por lo que conviene seguir las normas de higiene y prevención para evitar este tipo de problemas y, así, tener una cosecha saludable y abundante.

Mildiú velloso

El mildiú velloso (Bremia lactucae) es una gran amenaza para el cultivo de lechuga bajo techo, pero también para los cultivos extensivos. Los síntomas típicos de la enfermedad aparecen en el haz de las hojas como manchas de color amarillo oliva que se oscurecen gradualmente. En el lado inferior, por otro lado, se puede observar una capa de color blanco grisáceo con esporas. Se inhibe el desarrollo posterior de las plantas infectadas.

Lactucase

El patógeno B. lactucae se propaga en condiciones de alta humedad del aire, en el rango de temperatura entre 12 y 19 grados C. Para reducir las pérdidas de producción, vale la pena elegir variedades resistentes a esta enfermedad para el cultivo. El desarrollo de esta enfermedad también se previene plantando plantas en una densidad adecuada.

Oídio (Erysiphe cichoracerum)

En el caso del oídio (Erysiphe cichoracerum), aparece una capa gris blanquecina tanto en la parte superior como en la inferior de las hojas. La enfermedad puede propagarse rápidamente con los conidios de (otras) plantas infectadas. Al igual que ocurre con el mildiú velloso, existen en el mercado variedades resistentes a esta enfermedad, por lo que pude que desees echarles un vistazo antes de iniciar con el cultivo de lechuga en maceta.

Moho Gris

Por su parte, los síntomas comunes de la infección de moho gris (Botrytis cinerea) son manchas grises que generalmente aparecen en la parte inferior de las hojas. La alta humedad del aire y la temperatura cercana a los 10 grados centígrados son condiciones óptimas para el desarrollo de la enfermedad. El sustrato utilizado para el cultivo no debe contener residuos vegetales que puedan estar habitados por B. cinerea. De lo contrario, esta podría ser la causa de que perdamos nuestra cosecha de lechuga.

Las hojas de lechuga en contacto directo con el sustrato contaminado se infectan con mayor frecuencia, como es el caso de la esclerodermia. Para ambas enfermedades, la descontaminación del sustrato es un factor importante para prevenir la propagación de patógenos.

Sclerotinia sclerotiorum

Los síntomas de Sclerotinia sclerotiorum se forman en el cuello de la raíz en forma de manchas acuosas, junto con micelio blanco y esclerocios negros. La fuente de podredumbre son los esclerocios que hibernan en el suelo. En el cultivo de la lechuga es importante seguir las normas de higiene, así como no aumentar la humedad y mojar las hojas.

Como ya mencionamos, en la actualidad, no existen en el mercado preparados para la protección de la lechuga frente a la pudrición bacteriana; si bien algunos preparados con un enfoque general pueden ser de gran ayuda frente a la mayoría de plagas y enfermedades. Por lo tanto, debes seguir las recomendaciones de profilaxis: riego y fertilización adecuados, así como recordar mantener las plantas en buenas condiciones, lo que puede proteger contra la mayoría de las enfermedades y plagas que afectan a la lechuga.

Cultivar lechuga en macetas ¿es posible?

Como has podido darte cuenta cultivar lechuga es algo realmente sencillo y que también se puede llevar a cabo en maceta, bastará con que uses macetas de grandes dimensiones o bien, si tienes sitio, te decantes por una mesa de cultivo que te permitirá cultivar lechuga como un auténtico profesional.

Si sigues las condiciones y reglas de cuidado que hemos compartido contigo en esta ocasión, seguramente podrás disfrutar de tu primer cultivo de lechuga de la mejor forma posible.

¿Preparado para cultivar lechuga y asegurarte el suministro de la misma para todo el año?