10 consejos para cuidar un poto como un profesional

Potos
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El poto es una planta de tipo trepadora que suele encontrarse en diversos bosques tropicales del mundo. Una de sus principales características es su conjunto de hojas verdes, pero con algunos vivos en color beige o crema. Son estas hojas y su tallo las que ayudan a que esta planta pueda encontrar una guía, desplazándose por el suelo de la selva o bosque y, así, trepe hasta encontrar un sitio con la correcta cantidad de luz para su desarrollo. En un principio, estas hojas son de pequeño tamaño y no son muy fuertes, sin embargo, en cuanto encuentran el sitio indicado, las hojas y el tallo se vuelven más grandes y gruesos.

Hoy en día, se ha vuelto una planta muy popular en interiores, debido a la facilidad de su cuidado y al toque estético que puede aportar a diversos espacios. Además, si quieres reproducirlo, tiene la ventaja de que puedes realizar esquejes de las puntas y simplemente plantarlos en la maceta o directamente en la tierra.

¿Estás interesado en tener un poto y deseas conocer cómo cuidarlo como un profesional?, a continuación, compartimos contigo 11 consejos que te serán de mucha ayuda:

Riego del poto

Si quieres conservar tu poto por muchos años y al mismo tiempo permitir que se desarrolle de forma óptima, debes de tener especial cuidado con el tema del riego de tu poto, y es que si bien es una planta que habita en suelos tropicales, la realidad es que el hecho de que el sustrato permanezca constantemente húmedo (y esto es aún peor en una maceta que no cuenta con una correcta filtración), simplemente le haremos daño.

Por ello, lo mejor es que te asegures que se seque la capa más superficial del sustrato antes de realizar otro riego; de manera ideal, deja que pasen de dos a tres días para que el sustrato se seque correctamente, esto, antes de volver a regar.

Evita colocarlo a pleno sol

Al ser una planta que habita en el suelo de los bosques tropicales es lógico que no cuente con una exposición directa al sol en su hábitat natural. De esta forma, debemos intentar reproducir sus condiciones ideales de luz en nuestro hogar. ¿Qué significa esto? Que si tenemos a nuestro poco en una maceta o recipiente cerca de una ventana, por ejemplo, o cualquier otra fuente de luz natural, debemos evitar que se encuentre a pleno sol. Así, un buen consejo es tamizarla con una cortina.

Dale un soporte a tu poto

¿Recuerdas que el poto es una planta cuyos tallos y hojas se arrastran buscando un soporte, verdad? Bueno, esto también tenemos que reproducirlo en casa. Para ello, puedes colocar palitos alrededor de la planta o ubicar junto a una reja por donde estas guías puedan crecer fácilmente y fijarse. Por otra parte, si no quieres que crezca demasiado, como hablaremos más adelante, simplemente evita demasiada exposición al sol y realiza podas o cortes de esquejes de forma frecuente.

Usa el abono adecuado

Poto

El poto también necesita de un abono correcto. El abonado se debe de llevar a cabo se cada tres meses y la más fuerte de ellas durante la primavera. Esto facilitará su desarrollo y lo ayudará a mantenerse saludable. Los abonos o fertilizantes generales, empleados para la mayoría de plantas de jardín o del huerto funcionarán bien.

Poda tu poto sin miedo

En el momento en que los tallos ya viejos se queden desnudos, es decir, sin hojas, debemos de podarlos para evitar que sigan consumiendo recursos de la planta, debilitándola; o bien, que puedan ser fuente de alguna plaga o enfermedad.

El proceso de poda más fuerte puede realizarse en cualquier época del año; aunque el mejor momento, sin duda, será cuando su crecimiento comienza a ralentizarse; por ejemplo, en el periodo de otoño e invierno. Recuerda sólo retirar las hojas y tallos que han adquirido una tonalidad amarilla o que ya están muertos (marchitos).

Mantén a tu poto con la temperatura adecuada

La temperatura ideal en la que el poto se desarrolla y se mantiene de la mejor forma es en el rango de los 16 a los 22 grados. En tanto que las mínimas, por ejemplo, durante el invierno, son de entre 4 y 8 grados. Si deseas que tu planta crezca correctamente, no dudes en intentar reproducir estas condiciones.

Realiza esquejes y plántalos

Si tu poto ha ido perdiendo follaje o se nota un tanto deslucido, no te preocupes, esto tiene solución. Para ello, puedes realizar esquejes de algunos de los tallos más saludables y plantarlos, después, en la base de la planta, junto al tallo, en la misma maceta en la que se encuentra. Esto aportará una mayor densidad, produciendo ramificaciones en unas cuantas semanas.

Airea a tu poto de vez en cuando

Cuidar un poto

Un buen truco para tu poto que aún es joven, es que saques la maceta a tu jardín o balcón por la mañana y antes del mediodía, cuando el sol es más fuerte, lo metas a casa. Después, de 5 a 8 de la tarde puedes sacarlo de nuevo; esto optimizará la cantidad de luz que las hojas puedan captar, sin que el sol lo dañe de forma directa en las horas del cenit.

Mímalo cuando llegue a la madurez

Si tu poto ya es demasiado grande (de hecho, se sabe que este tipo de plantas pueden alcanzar hasta una longitud de 20 metros de largo); lo mejor es que reduzcas gradualmente su exposición al sol; o bien, que realices esquejes y podas con mayor frecuencia. Esto evitará que de una bonita planta de interior se vuelva una molestia para el hogar.

Úsalo como purificador

Coloca tu poto dentro de casa. Además de que facilita el cuidado, se sabe que es una planta perfecta para purificar el aire dentro de un edificio; de esta forma, ayuda a evitar la presencia peligrosa de sustancias nocivas. Por supuesto, ni que decir tiene que de esta forma podrás disfrutar de tu poto en el interior y disfrutar de él por ejemplo, mientras lees o ves la televisión.

Como has podido darte cuenta, el poto es una planta relativamente sencilla de cuidar y reproducir en casa o en el jardín (si bien en este entorno se complica un poco más). Estamos seguros que si pones en práctica los consejos y trucos que hemos compartido contigo en esta ocasión, tu poto crecerá de forma hermosa y decorará tu hogar de la mejor forma posible.

¿Preparado para cuidar tu proto como un auténtico profesional?

Villamandos

Propietario de un huerto urbano donde produzco mis propias fresas, pimientos, frambuesas y sobre todo paso ratos muy agradables viendo crecer y desarrollarse mis plantas, ¿te unes a la fiebre de los huertos urbanos?

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