Cómo cuidar un arce japonés como un profesional

Cuidar un arce japones no es una tarea demasiado complicada y no requiere cuidados adicionales ni condiciones de cultivo excepcionales. Sin embargo, hay algunas reglas obligatorias a tener en cuenta, que compartimos contigo a continuación.

Recuerda que el lugar ideal para su desarrollo es una zona protegida, más sombreada, o al menos parte del día en semisombra, y el suelo puede ser de casi cualquier naturaleza, siendo apto incluso para el cultivo en maceta. Idealmente, el suelo debería ser ligeramente ácido, pero crece bien en casi cualquier tipo de suelo. En macetas, prefiere el espacio amplio y que no compita con otras plantas; aplicándose esta misma regla para plantarse en el suelo. No plantes el arce japonés en áreas donde el viento sopla fuerte o no se encuentra protegido en absoluto.

Cómo plantar un arce japonés

A la hora de plantar un arce japonés en el suelo debes tener en cuenta cómo se compró. Si has comprado una planta con la raíz "desnuda", debes plantarlo, por lo general, entre octubre y marzo. Ten cuidado de que el suelo no se congele porque entonces tu arce sufrirá.

Haz un agujero lo suficientemente grande para que entre la raíz, abre la envoltura de plástico y no toques la raíz, y si tienes tierra cúbrela por completo. Riega abundantemente e intenta en lo posible eliminar los espacios de aire de la raíz y hacer la mejor salida posible. Esto se hace con abundante agua y convirtiendo la tierra en una pasta pegajosa. Así mismo, debes de mantener el suelo húmedo durante 1-2 meses después de la siembra.

En el caso de plantar un arce japonés comprado en maceta, la cosa es mucho más sencilla. Se puede plantar en cualquier época del año, siguiendo la regla de que deben pasar de 4 a 6 semanas hasta la primera helada.

Arce japonés en maceta

Si tienes un arce japonés en maceta las reglas son las mismas que cuando se planta en tierra, con la recomendación de usar una maceta o contenedor lo suficientemente grande, dado que el arce japonés prefiere un gran espacio en la raíz. La maceta debe tener orificios de drenaje, para estar bien drenada en todo momento. Puedes poner grava en el fondo para asegurarte de que el agua no se estanque. Si usas platos debajo de la maceta, nunca dejes que se quede demasiada agua en ellos ya que podría ser perjudicial para el arce, pero también para a gran mayoría de las plantas. Usa turba de muy buena calidad, ligeramente ácida, pero también la de Ph medio es excelente.

En macetas, utiliza siempre fertilizantes de liberación controlada, ya que el ambiente es, de cierta forma, artificial.

Fertilizantes para usar con un arce japonés

En el suelo, normalmente, el arce japonés no necesita fertilizante adicional, solo en condiciones excepcionales. Debes tener más cuidado en el sitio de plantación (como hemos mencionado antes, la ubicación no debe ser demasiado soleada), y en el nivel de humedad (ni demasiado seco ni que se estanque el agua).

En macetas, la cosa cambia, ya que el entorno de cultivo es artificial. El arce japonés necesita fertilizante, desde abril hasta octubre (de primavera a otoño). Recomendamos utilizar fertilizantes de liberación controlada, profesionales, con alto contenido en Nitrógeno (N) y Potasio (K). Ojo con lo que compras, porque hay de muchos tipos. La liberación se realiza por un período de tiempo determinado y dependiendo de esto sabes cuándo necesitas agregar más. Nunca compres donde esto no esté claramente indicado. Por lo general, los fertilizantes de calidad, con liberación controlada, son para pocas semanas, 3-4 meses, 5-6 meses o hasta 6-9 meses.

Por otra parte, emplea fertilizante foliar cuando sea necesario y si notas señales de alarma.

Cómo cuidar un arce japonés en invierno

La mayoría de las especies de arces japoneses que se venden son resistentes a las heladas, pero dada la gran variedad, no debemos de pasar por alto el verificar esto antes de comprar una planta. Nuestra recomendación es comprar solo ejemplares que ya hayan pasado un invierno creciendo en tu país, para que la aclimatación se consiga por completo.

En invierno, el arce japonés no plantea ningún problema en particular, pero si lo cultivas en maceta, te recomendamos que protejas la maceta con un plástico de burbujas, o al menos con una cubierta algo gruesa. Si puedes, aunque no sea necesario, coloca la maceta junto a una pared de la casa, o cerca de un edificio. No guardes el arce en sótanos o garajes ni coloques abono en invierno; así mismo, reduce la frecuencia del riego.

Cómo reproducir un arce japonés

Multiplicar el arce japonés no es tarea fácil para un principiante en jardinería. Por lo tanto, el método de propagación más utilizado es una combinación de cultivo a partir de semillas, esquejes e injertos. Los grandes productores son pocos en Europa, y generalmente utilizan una planta cultivada a partir de semillas, que luego se utiliza para producir un injerto de una planta grande y de calidad.

Por semillas

No entraremos en detalles, ya que esta técnica no está al alcance de cualquiera. Como decía, la técnica de propagación requiere una experiencia muy larga y profesional, como es el caso de la propagación del arce japonés a partir de semillas.

¿Qué hay de la poda?

La técnica de poda de un arce japonés no requiere conocimientos avanzados. Solo corta cuando la planta no esté en la vegetación (generalmente de noviembre a marzo). Puedes podar y cortar el arce japonés durante el resto del año, sin embargo, corres el riesgo de enfermarlo y debilitar su salud.

Dale la forma deseada, aunque crecerá muy bien de todos modos, dependiendo del diseño que quieras obtener con el tiempo.

Enfermedades y plagas del arce japonés

El arce japonés es una planta muy resistente en general y no plantea ningún problema en particular en lo que respecta a enfermedades y plagas. Habitualmente, las personas confunden los síntomas dados por una zona demasiado soleada, o por corrientes de aire demasiado fuertes, con enfermedades relacionadas con insectos u hongos.

Plagas

No tiene muchas, pero te recomendamos actuar principalmente de forma proactiva, fumigando preventivamente con insecticidas y acaricidas, en general, en los meses de abril, junio y septiembre. En caso de síntomas severos, consulta a un especialista.

Enfermedades

Al igual que con las plagas, actúa proactivamente y realiza tratamientos preventivos con insecticidas y fungicidas. Idealmente, debemos rotar, por seguridad, los tratamientos empleados, sin utilizar las mismas sustancias o métodos dos veces seguidas (ya que esto suele generar cierto tipo de resistencia).

¿Preparado para cuidar un arce japones como un autentico profesional?